Reacciones a la cadena insolidaria catalana

Ayer, por motivos laborales, tuve que viajar a Cataluña.

Tengo que reconocer que paseando por las calles de Lleida, no puedes dejar de ver la profusión de banderas independentistas (ese pastiche de bandera cubana y senyera aragonesa que se inventó no se que condecorado nazionalista catalán) y que el ambiente previo al día de hoy era de fervor nazional y ganas de revancha contra los "fascistas mesetarios", es decir contra todos nosotros que no sólo tenemos que pagar las alegrías presupuestarias de los sucesivos gobiernos autonómicos (que no autónomos) catalanes sino que además tenemos la culpa de todo mal que les aqueje.

Reconozco también que si no fuera por la certeza (no propia sino fruto de la lectura de estudios de .expertos economistas mucho más sabios que yo) de que una separación de Cataluña sería nefasta para la economía española y no sería soportable ni en los tiempos de bonanza económica (menos aún ahora) por España, pero muchísimo menos soportable por Cataluña; le que me pide el cuerpo es decir como diría mi abuelo: "si queréis iros, pues veros, que ya veréis como os veis aluego"

Pienso que esto ya no tiene quien lo pare. 

Y es prioritario pararlo porque la economía española (catalana incluida) sufriría un retroceso tan grande que no creo que pudiéramos salir.

La única solución posible es pactar. Pero para eso tendríamos que tener unos políticos con una amplitud de miras diferente.

La solución es una reunión de Mariano Rajoy, Alfredo Pérez Rubalcaba, los representantes catalanes de ambos partidos, Rosa Díez y Albert Rivera (no se puede contar para esto con IU. SI mandara, en IU, Anguita sí pero con los de ahora ni de coña) y una decisión conjunta de un gobierno de unidad nacional (en este caso con "c" y no con "z") que tenga como primer paso la modificación de la ley electoral de manera que sin perjudicar a los partidos nacionales grandes no discrimine a los pequeños y sobre todo no beneficie a los nazionalismos periféricos.

Hemos alimentado a una alimaña y la única manera de evitar que nos devore es acabar con ella de forma rápida y eficaz.

Desgraciadamente eso no pasará, porque la tormenta meteorológica que se prevé para hoy no creo que pare la tormenta política que el necio de Mas está desatando

Aquí les dejo un diálogo asonetado de pensamientos sobre la cadena insolidaria catalana, entre el alcalde de Barcelona y la alcaldesa de Madrid.

Pensamientos asociados de dos alcaldes en conflicto

Alcalde de Barcelona

Eolo, Dios falaz y españolista

ha decidido unirse a los tiranos

y mandar una tormenta de verano

a la lucha inmortal nacionalista.

No solo hay que aguantar a los fascistas

y opresores del gobierno de Mariano

sino, a traidores vientos castellanos

socabando el ardor separatista.

¿Es que no habrá un momento de respiro

para el llanto y la lucha catalana?

¿No habrá ni un discurso de condena?

Mejor entonces, cauto me las piro

y me voy  a pasear esta mañana

pesando del marrón de la cadena

Alcaldesa de Madrid

¡Que bien! que Mas proponga la idiotez

de hacer una cadena  de protesta

pidiendo, vehemente, la funesta

consulta. ¡Qué notable estupidez!

Así será palpable su avidez

al ver que con tan torpe zapatiesta

pretenden la barbarie deshonesta

de hacer patente su desfachatez

Es bueno que la Generalidad

se vea abochornada en los periódicos

al dar ese ridículo traspiés

Asi se oculta mi mediocridad

y pueden  olvidar el episódico

discurso en Buenos Aires en inglés

Y sean ustedes buenos que alguno tiene que serlo y estos no están a la altura